Salud y Dictadura

A 47 de años del 24 de marzo de 1976
Aportes para la re-construcción de la salud comunitaria



“Nuestra definición de salud es que el hombre y la mujer
que resuelven conflictos están sanos.
La salud es la lucha por resolver un conflicto antagónico
que quiere evitar que alcancemos el óptimo vital
para vivir en la construcción de nuestra felicidad”
Floreal Ferrara[i]



El 24 de marzo de 1976 a través de un golpe de estado, el gobierno argentino quedó “al mando” de las fuerzas armadas y se inició en nuestro país un período denominado oficialmente “Proceso de Reorganización Nacional” y conocido como la dictadura militar.

Se instaló con ello un régimen caracterizado por el terrorismo de estado que, con el argumento de acabar con la subversión, se destacó por la violación sistemática de los derechos humanos, a través de la censura y la persecución, el secuestro, la tortura, la desaparición forzada y el robo de bebés nacidos durante el cautiverio de las personas secuestradas.

Se persiguió a familias y personas de muy diversos ámbitos –militantes populares, artistas, trabajadorxs, estudiantes, etc.-, todxs aquellxs que desde el gobierno consideraran una amenaza para su desarrollo y que, con el advenimiento de la democracia, se constataron como 30000 las personas desaparecidas y 500 los bebés robados.

Se trató de un plan de gobierno, con el apoyo de poderes fácticos locales e internacionales, para llevar adelante políticas de corte neoliberal que recortaron significativamente el rol del estado como garante del bienestar de la población, entre tantas cosas, del acceso a la salud.

Contrariamente, a nivel internacional, en 1976, se gestaba la Conferencia de Alma Ata, concretada en septiembre de 1978 y realizada en Kazajistán; de la que participaron 134 países, incluyendo al secretario de salud argentino por entonces, Almirante Manuel Irán Campo.

En dicha Conferencia se reconoció la estrategia de la Atención Primaria de la Salud (APS) como la vía para alcanzar “Salud para todos en el año 2000”. Y se la definió como: “la asistencia sanitaria esencial basada en métodos y tecnologías prácticas, científicamente fundadas y socialmente aceptables, puesta al alcance de todos los individuos y familias de la comunidad mediante su plena participación y a un costo que la comunidad y el país puedan soportar…” .

Muy lejos de los principios de Alma Ata, describe con claridad Ariel M. Goldman, tres hechos que cambiaron el destino del sistema de salud argentino durante la dictadura, profundizando los problemas de base: la transferencia de Hospitales Nacionales hacia las provincias y desarrollo de un mercado de servicios privado; la derogación de la ley 20.748 «Sistema Nacional Integrado de Salud»; y el impacto de la violencia institucional como problema de salud pública, aunque el sistema sanitario negó, concordantemente con los discursos oficiales de la época.

Quienes apostamos a la construcción de una salud comunitaria, y aún reivindicamos los principios de la APS, observamos cómo el individualismo que imperó durante los años de la dictadura, caracterizado por el “no te metas” y la culpabilización de las víctimas, hizo mella en las comunidades.

Cómo también, pese a los procesos de memoria verdad y justicia que se han dado en nuestro país gracias a la lucha de los organismos de derechos humanos –Abuelas y Madres de Plaza de Mayo, Familiares, Exiliadxs, Amigxs, hijxs- en el presente continúan difundiéndose discursos que niegan el terrorismo de estado, que niegan las 30000 personas detenidas dasaparecidas.

La salud comunitaria propone la re construcción de los vínculos –rotos, desaparecidos-, la participación y el protagonismo de la comunidad en la identificación y planificación para el abordaje de sus procesos de salud, que de ninguna forma podrías estar ajenos a los procesos sociales y políticos que atraviesan. No podríamos sanar aquello que silenciamos, aquello que no diagnosticamos.


¡MEMORIA, VERDAD Y JUSTICIA SIEMPRE!
¡30000 COMPAÑERXS DETENIDXS DESAPARECIDXS PRESENTES!
¡AHORA Y SIEMPRE!



Referencias:
[i]Blanco Beatriz, 19/04/2010. “La salud es la solución del conflicto”. Entrevista inédita a floreal ferrara, médico sanitarista recientemente fallecido. Página 12. https://www.pagina12.com.ar/diario/dialogos/21-144143-2010-04-19.html

[ii]DECLARACION DE ALMA-ATA. Conferencia Internacional sobre Atención Primaria de Salud, Alma-Ata, URSS, 6-12 de septiembre de 1978. https://www.paho.org/hq/dmdocuments/2012/Alma-Ata-1978Declaracion.pdf

[iii]Goldman Ariel M. 24/03/2022. “El sistema de salud durante la última dictadura militar”. Economía de la salud. https://economiaygestiondelasalud.finance.blog/2022/03/24/la-ultima-dictadura-militar/

Foto de portada: «Madre e hija» de Adriana Lestido (1982)
Picture of  Por: Mae Ghigliazza

Por: Mae Ghigliazza

Lic. en Trabajo Social
Hija de Ricardo M. Ghigliazza e Irma N. Tardivo, militantes populares detenidxs desaparecidxs durante el terrorismo de Estado.

Compartir:

Facebook
Twitter
Pinterest
LinkedIn

Recibí nuestras novedades

Recibí las novedades